jueves, 27 de octubre de 2011

You look super cute when you smile


Aprendí que la felicidad se encuentra en pequeños momentos que se esfuman rápidamente, y que solamente es cuestión de aprovecharles. A la felicidad, al igual que al amor, hay que cuidarla día a día, o esa bella flor que apareció de la nada se marchitará por completo y será prácticamente imposible hacerla florecer de nuevo. Es un precio pequeño por la felicidad, ¿no? Aprovecharla, vivir al máximo siempre que te sea posible y hacer caso a tu corazón. Las tres reglas de oro que todos deberíamos seguir. ¿Un mal día? Vendrán días mejores. ¿Un buen día? Aprovéchale, porque es posible que mañana no lo sea tanto. Ese es el secreto de la felicidad, ni más ni menos. ¿Queréis la última pista? Está bien, os la daré. La felicidad, al igual que una buena cerveza, sabe mucho mejor compartida.

1 comentario:

  1. Eres y escribes genial y me encanta verte feliz por eso esa foto es de mis favoritas. Así de claro. Te amo mucho, muchísimo. Y respecto al texto son cosas que yo misma he vivido y muchísima gente la vive, gracias a esta maravillosa sociedad que no hace más que destrozarnos.

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